El EBITDA ajustado es una versión modificada del EBITDA que excluye ciertos ingresos o gastos que no son recurrentes o que no reflejan la actividad operativa habitual de la empresa. Estos ajustes permiten a los analistas y gestores obtener una visión más clara del rendimiento subyacente de una empresa, eliminando los efectos de eventos extraordinarios o atípicos. Es una métrica utilizada ampliamente en fusiones y adquisiciones (M&A) para valorar empresas y proyectar su capacidad de generación de beneficios futuros de forma más precisa.
El EBITDA ajustado ajusta el EBITDA estándar, eliminando partidas como gastos de reestructuración, costes legales no recurrentes, compensaciones extraordinarias, entre otros, para proporcionar una visión más limpia de la operación básica de la empresa. Pero tiene más miga que eso, quédate hasta el final del artículo y compruébalo.
Vuuuuuamos guerrero!!!
Fórmula del EBITDA Ajustado
La fórmula en sí no puede ser más sencilla. Realmente la dificultad estriba en decidir qué contamos como gasto o ingreso extraordinario:
(Disclaimer: Recuerda que puedes disfrutar (muchísimo 🤓) de la mejor guía para calcular tu EBITDA aquí)
Los ajustes más comunes incluyen:
- Gastos de reestructuración.
- Pérdidas o ganancias por fluctuaciones de divisas.
- Costes por litigios.
- Inversiones no recurrentes.
Aunque vamos a indagar un poco más en estos ajustes más comunes.
Tipos de Ajustes Comunes en el EBITDA Ajustado según la Industria
Dependiendo de la industria en la que opere la empresa, los ajustes específicos en el EBITDA ajustado pueden variar significativamente. Algunas industrias realizan ciertos ajustes para capturar mejor la rentabilidad real de sus operaciones.
• Sector tecnológico: Suele ajustarse por gastos elevados en investigación y desarrollo (I+D), que aunque recurrentes, son costosos y pueden distorsionar la imagen del EBITDA. Estos gastos se eliminan cuando se evalúa el EBITDA ajustado para obtener una visión más clara de la operación central.
• Retail y hotelería: En sectores como el retail o la hotelería, a menudo se ajusta por costes de alquiler y relocalizaciones, especialmente cuando hay cierres o aperturas de nuevas tiendas u hoteles.
• Industria farmacéutica: Aquí se excluyen generalmente gastos relacionados con ensayos clínicos o proyectos de desarrollo que pueden no ser recurrentes pero impactan de manera significativa los resultados financieros del corto plazo.
Con estos ejemplos, te das cuenta de cuáles serían los gastos, costes e ingresos a descontar. A partir de aquí ya dependerá del criterio de cada uno, de la industria y de cada casuística particular.
Relación entre el EBITDA Ajustado y el Crecimiento Empresarial
El EBITDA ajustado es una herramienta poderosa para proyectar el crecimiento futuro de una empresa. Al eliminar elementos no recurrentes, los analistas pueden utilizar esta métrica para predecir la capacidad de una empresa para generar flujo de caja sostenible en el futuro. Al eliminar los eventos únicos, se obtiene una imagen más confiable de la tasa de crecimiento de los beneficios operativos de la empresa.
Por ejemplo, una empresa que realiza grandes inversiones o reestructuraciones durante un año puede ver su EBITDA reducido. Sin embargo, si estos gastos no son recurrentes, ajustar el EBITDA para eliminarlos ofrecerá una visión más clara del potencial futuro de la empresa sin la interferencia de estos costos temporales.
Comparativa entre el EBITDA Ajustado y Otras Métricas Ajustadas
El EBITDA ajustado no es la única métrica que se ajusta en los estados financieros. Otras métricas, como el EBIT ajustado y los ingresos ajustados, también pueden proporcionar visiones más específicas del rendimiento financiero de una empresa.
• EBIT Ajustado: Similar al EBITDA ajustado, pero ajustado por eventos no recurrentes antes de incluir los efectos de depreciación y amortización. Es útil para evaluar la rentabilidad excluyendo partidas no monetarias.
• Ingresos Ajustados: En algunos sectores, se ajustan los ingresos para eliminar partidas que no se espera que ocurran de manera regular. Por ejemplo, ingresos derivados de una venta puntual o de contratos únicos.
Estas métricas ajustadas permiten realizar comparaciones más justas entre empresas que, de otro modo, tendrían resultados financieros distorsionados por eventos únicos.
El Impacto de las Normas Contables en el EBITDA Ajustado
Las normas contables como las NIIF o GAAP influyen considerablemente en cómo se calcula el EBITDA ajustado. Cada conjunto de normas tiene diferentes reglas sobre qué partidas se pueden incluir o excluir en los estados financieros, lo que puede provocar variaciones en cómo se presenta el EBITDA ajustado en empresas que operan bajo diferentes normativas contables.
Por ejemplo, bajo las NIIF, es posible que se trate de forma diferente la depreciación y amortización de ciertos activos, lo que afecta el cálculo del EBITDA ajustado. Es importante que los analistas e inversores comprendan estas diferencias para no comparar métricas ajustadas calculadas bajo diferentes normativas sin tener en cuenta estas variaciones.
EBITDA Ajustado en Startups y Empresas en Expansión
En el caso de startups o empresas en fase de expansión, el EBITDA ajustado adquiere una importancia especial. Las startups suelen estar en una fase de inversión intensiva, lo que significa que a menudo reportan EBITDA negativos debido a grandes gastos en marketing, contratación o expansión de infraestructura. Además, el impacto de un gasto extraordinario de 10.000€ no es lo mismo para una startup o empresa de reciente creación que para una empresa consolidada; de ahí que el EBITDA ajustado sea, a mi entender, aún más importante en este tipo de empresas.
Ajustar el EBITDA en estos casos permite a los inversores obtener una imagen más clara de la capacidad futura de la empresa para ser rentable. Al eliminar estos gastos no recurrentes, el EBITDA ajustado se convierte en una métrica útil para evaluar si una startup tiene un modelo de negocio sostenible.
Limitaciones Éticas y Riesgos del EBITDA Ajustado
Aunque el EBITDA ajustado puede ofrecer una visión más precisa del rendimiento operativo de una empresa, también presenta riesgos si se utiliza de manera inapropiada. Si una empresa realiza demasiados ajustes o no justifica adecuadamente los elementos que elimina, puede dar una imagen demasiado optimista de su situación financiera. I mean…la tentación a eliminar gastos extraordinarios suele ser muy alta y, por tanto, sacar una mejor foto del EBITDA ajustado que se empieza a considerar gasto extraordinario todo.
Un mal uso del EBITDA ajustado puede llevar a manipulaciones contables que inflan artificialmente los beneficios. Es fundamental que los ajustes sean transparentes y razonables, con explicaciones claras de por qué ciertos elementos fueron excluidos.
Diferencias entre EBITDA Ajustado y EBITDAR
He visto algunas veces en algunos sectores, especialmente en industrias como el retail o la hotelería, que se utilice una métrica conocida como EBITDAR (Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, Amortization, and Rent). Este indicador ajusta el EBITDA por los gastos de alquiler, lo que puede ser útil en empresas con grandes cargas por rentas de alquileres. Comparar el EBITDA ajustado con el EBITDAR puede ofrecer una visión más completa de los costes de operación.
Concluyendo y resumiendo, el EBITDA ajustado es una herramienta valiosa para evaluar el rendimiento recurrente de una empresa, eliminando los efectos distorsionantes de eventos únicos o no recurrentes. Sin embargo, debe ser utilizado con cautela y con transparencia para evitar manipular los resultados. Es especialmente útil en situaciones como fusiones y adquisiciones o para evaluar empresas en crecimiento, pero siempre debe complementarse con otras métricas ajustadas y no ajustadas para obtener una visión completa de la salud financiera de una empresa.
To the moon!!! 🐙