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¿Qué es una Factura Proforma?

Bienvenidoae! En el día a día de las operaciones comerciales y la administración de una empresa nos encontramos con una gran variedad de documentos 🤯 Uno de los más importantes, y bastante a menudo malinterpretado, es la factura proforma. Aunque su nombre puede llevar a confusión, no es una factura en el sentido estricto, sino una herramienta comercial de gran valor.

Pero, ¿qué es exactamente? ¿Equivale a una factura real? ¿Cuándo debes utilizarla y por qué es tan crucial en el comercio internacional? Este artículo resolverá todas estas dudas, ofreciendo una guía completa dirigida a todos los profesionales, desde autónomos y pymes que dan sus primeros pasos hasta directores financieros que buscan optimizar sus previsiones.

Vuuuuuamos guerrero!!!

¿Qué es una factura proforma?

Una factura proforma es un documento comercial que especifica los detalles de una futura operación de venta. Funciona como una declaración de intenciones en la que el vendedor se compromete a suministrar ciertos bienes o servicios a un precio y en unas condiciones determinadas. Su principal característica es que es un documento informativo, no contable, y por tanto, no tiene validez fiscal.

Se podría considerar una «factura borrador» o una oferta comercial formalizada. Su objetivo es proporcionar al comprador toda la información necesaria de manera clara y detallada antes de que la transacción se confirme definitivamente.

Una factura proforma no es una solicitud de pago, sino un acuerdo previo que formaliza las condiciones de una futura transacción.

¿Para qué sirve una factura proforma? Sus usos principales

Aunque no genera una obligación de pago, la factura proforma es una herramienta versátil con aplicaciones muy concretas y valiosas.

Formalizar una oferta comercial

Es su uso más común. Permite al vendedor presentar al comprador todos los detalles de la operación (productos, cantidades, precios, condiciones de entrega y pago) en un formato estandarizado y profesional. Esto aporta claridad y seguridad a ambas partes antes de cerrar el trato.

Acreditar las condiciones en el comercio internacional

Este documento es fundamental en las operaciones de exportación e importación. Los importadores la necesitan para múltiples trámites, como solicitar licencias de importación, iniciar la apertura de un crédito documentario (o carta de crédito) ante una entidad financiera, o para el despacho de aduanas en el país de destino. Funciona como una prueba del valor y las características de la mercancía que se va a recibir.

Solicitar financiación o permisos

Una factura proforma puede servir como documento justificativo ante un banco o una institución pública para demostrar una inversión o un gasto futuro. Por ejemplo, si una empresa necesita solicitar un préstamo para comprar maquinaria, la proforma del proveedor acredita el coste y las condiciones de dicha compra.

Acompañar muestras sin valor comercial

Cuando se envían muestras de productos que no se van a vender, la factura proforma se utiliza para justificar el envío a nivel logístico y aduanero, especificando que no tiene valor comercial y que no se generará una factura definitiva por ellas.

¿Qué información debe contener una factura proforma?

Aunque no tiene la misma rigidez legal que una factura ordinaria, una proforma debe ser lo más completa y precisa posible para cumplir su función informativa y evitar malentendidos. Una buena plantilla de factura proforma debería incluir los siguientes datos obligatorios:

  • Título claro: Principal diferencia con una factura normal: debe indicar explícitamente «Factura Proforma» en el encabezado para no confundirla con una factura comercial.
  • Fecha de emisión.
  • Datos identificativos del vendedor y del comprador: Nombre o razón social, NIF/VAT y dirección completa de ambas partes.
  • Descripción detallada de los productos o servicios: Incluyendo referencias, modelos y cualquier especificación relevante.
  • Cantidad o unidades de cada producto.
  • Precio por unidad y precio total de la operación.
  • Desglose de impuestos aplicables: Se puede incluir una estimación de impuestos como el IVA, pero siempre especificando que se trata de un cálculo informativo y que el documento no genera una obligación tributaria.
  • Condiciones de pago y de entrega: Plazos de pago, método (transferencia, etc.) e Incoterms si se trata de una operación internacional.
  • Divisa en la que se realiza la operación (ej. EUR, USD).
  • Periodo de validez de la oferta: Es crucial indicar hasta qué fecha se mantienen las condiciones reflejadas en la proforma.
Ejemplo de factura proforma. Para que sirve, como emitir

Diferencias clave: proforma vs. factura ordinaria vs. presupuesto

Es fundamental para la correcta gestión empresarial no confundir estos tres documentos. La verdad que es una equivocación que continuamente me encuentro. Cada uno tiene una finalidad y unas implicaciones distintas. La siguiente tabla resume sus diferencias principales:

CaracterísticaFactura ProformaFactura OrdinariaPresupuesto
FinalidadInformativa / Oferta ComercialLegal / Fiscal / ComercialInformativa / Estimación
Validez Legal/FiscalNulaTotalNula (salvo aceptación)
Obligación de PagoNo generaSí generaNo genera
NumeraciónNo requiere ser correlativaDebe ser correlativa y únicaPropia, no fiscal
Registro ContableNo se registraSe registra en contabilidadNo se registra

Validez legal y contable de una factura proforma

Como hemos recalcado, la validez legal de una factura proforma es nula a efectos fiscales y contables. Esto tiene implicaciones directas:

  • No genera una obligación de pago: El cliente no está legalmente obligado a pagar basándose únicamente en este documento.
  • No se declara a Hacienda: No se incluye en las declaraciones de IVA ni en ningún otro impuesto.
  • No se registra en la contabilidad: No puede ser utilizada para registrar una venta o una compra en los libros contables de la empresa.
  • No justifica un gasto deducible: Un comprador no puede usar una factura proforma para deducirse el IVA o un gasto en el Impuesto de Sociedades.

Sin embargo, si la proforma es aceptada y firmada por el comprador, adquiere un valor de acuerdo comercial. Aunque no sustituye a un contrato, puede servir como prueba de que existía un compromiso y unas condiciones pactadas entre las partes.

Errores comunes a evitar al emitir una factura proforma

Para usar este documento de forma efectiva y profesional, es vital evitar ciertos fallos:

  1. No indicar claramente «Factura Proforma»: Puede llevar a que el cliente la confunda con una factura definitiva, generando confusión.
  2. Asignarle un número de la serie de facturación oficial: Las proformas deben tener su propia numeración o simplemente no llevarla, pero nunca deben mezclarse con la serie correlativa de las facturas con validez fiscal.
  3. Registrarla en la contabilidad: Es un error grave que distorsiona los estados financieros.
  4. Exigir su pago: No se puede reclamar legalmente el pago de una proforma. Para ello, se debe emitir la factura comercial correspondiente.
  5. Omitir la fecha de validez: Sin una fecha de caducidad, la oferta podría considerarse abierta indefinidamente, lo cual es un riesgo para el vendedor.

Otras preguntas frecuentes (FAQ)

¿Se puede anular una factura proforma?

Sí. Al no tener valor fiscal ni contable, simplemente se puede descartar o ignorar. Si las condiciones cambian, lo correcto es emitir una nueva proforma actualizada que sustituya a la anterior.

¿Es obligatorio convertir una proforma en una factura comercial?

Solo si la operación de venta finalmente se concreta. La proforma es el paso previo; si el cliente acepta y se realiza la entrega del bien o servicio, entonces el vendedor está obligado a emitir la factura comercial definitiva.

¿Tengo que declarar una factura proforma a Hacienda?

Rotundamente no. No se declara en ningún modelo fiscal, ni de IVA, ni de IRPF, ni de Sociedades. Es un documento puramente informativo a nivel comercial.

¿Puedo usar una proforma para ir a juicio si un cliente no me paga?

No. Para iniciar una reclamación judicial de una deuda, necesitas la factura comercial definitiva, que es el documento que legalmente acredita la operación y la obligación de pago.

En resumen, la factura proforma no es un simple borrador, sino una herramienta estratégica fundamental. Aunque carece de validez fiscal y contable, su valor reside en su capacidad para aportar claridad, seguridad y profesionalidad a las relaciones comerciales.

Es el documento que sienta las bases de un acuerdo, alinea las expectativas entre comprador y vendedor y agiliza procesos clave, especialmente en el comercio internacional.

Te invitamos a integrar la factura proforma de manera correcta en tus operaciones. Al hacerlo, no solo optimizarás tus procesos de venta y exportación, sino que también construirás una base de confianza y eficiencia con tus clientes.

To the moon!!! 🐙

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